Destrozada en pedazos.

Destrozada en pedazos.

Destrozada en pedazos camino sin rumbo. 

Escuchando el canto de aquel vagabundo. 

Que cuenta su historia de amor y dolor. 

Donde sin saber estaba también mi yo.

Me mira a los ojos mientras le escucho,

me dice llorando, mientras su suspiro se ahoga

en el canto de un desamor de estos campos.

Mi celebro se a detenido en un viejo recuerdo.

Se a quedado atascado en una ilusión.

Como ave sin alas, como un sueño inconcluso.

Como un amor que es mutante 

porque no puede hablar ni decir de su pena 

y en el inmenso silencio lo que hace es penar.

.....

Destrozada en pedazos camino sin rumbo.
Escuchando el canto de aquel vagabundo

que cuenta su historia de amor y dolor.

Entonces le dije tomando sus manos.

Mi corazón llora por una amarga pena.

Esa pena que llega clavándose en mi. 

Haciendo mi alma un eterno sufrir.

Donde estan mis mañanas,

en que espacio han quedado,

donde estan tus besos de hombre acalorado.

Dime mi vagabundo porque no vienes a mi.

Desgarra mi alma, quitando la pena.

Hazme el amor en otoño, has de mi cuerpo primaveras.

.....

Destrozada en pedazos por caminos sin rumbo.
Escuchando el canto de aquel vagabundo

que cuenta su historia de amor y dolor.

Me tomo en sus manos me abraso en su pecho

me dijo llorando sin saber que hacer.

Mis ojos ya no pueden ver

han quedados segados por la falta de amor.

Siento pena por mi y no se que hacer.

Que hacer con mi vida al pasar de los días.

Si cada noche al dormir no te tengo a mi lado.

Solo el leve recuerdo de un pasado 

que me hace soñar y llegar a un mundo deseado.

Le tome su palabra, me bebí su cuerpo.

Mientras el decía, mientras me miraba.

Mis manos se han helado, no las puedo mover.

Que a pasado con mis dedos, 

se perdieron una vez en tus cabellos

esas noches de ayer.

Cuando tu cuerpo y el mio hacían 

algo más que un querer. 

Besarme amor mio

me dijo mientras tocaba mis adentros. 

Mi vagabundo que tanto te he buscado.

.....

Destrozada en pedazos caminando sin rumbo.
Escuchando el canto de aquel vagabundo

que cuenta su historia de amor y dolor.

Así llego nuestra historia 

y caminamos los dos juntos por otros mundos. 

Amando y soñando, viviendo un mundo mejor.

Melba Mercedes Almeida - Azucala